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🥤❓¿REFRESCOS SIN AZÚCAR? ⚡Esto Es Lo Que Pasa Con Tu Glucosa
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Descubre la verdad sobre los refrescos sin azúcar.
SOMOS ESPECIALISTAS EN DIABETES!
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En nuestra constante búsqueda por un estilo de vida más saludable, nos encontramos tomando decisiones diarias sobre lo que comemos y bebemos. Una elección muy común es si optar por refrescos regulares o los light. Los refrescos regulares ya sabemos que están llenos de azúcar, pero aunque los light no tienen azúcar, también traen sus propias controversias. Hoy vamos a profundizar un poco más para ver si los refrescos light son realmente una opción más saludable y también vamos a hablar de los efectos de otros ingredientes que se encuentran en los refrescos en general.
Empezando con los refrescos regulares, están cargados de azúcar, ya sea sacarosa o jarabe de alta fructosa, y esta clase de azúcares son básicamente calorías vacías: dan energía pero poco o ningún valor nutricional. El consumo excesivo de estos azúcares está vinculado con varios problemas de salud como la obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. Además, estos azúcares afectan la salud dental y pueden contribuir a la erosión del esmalte.
Ahora, no solo el azúcar es un problema. Tanto los refrescos regulares como los light contienen ácidos como el ácido fosfórico y el ácido cítrico, que pueden dañar el esmalte dental, haciéndolos más susceptibles a caries. Y sobre la salud ósea, consumir demasiado refresco se ha asociado con una menor densidad ósea en algunos estudios. Esto podría deberse a que el alto contenido de fosfatos en los refrescos puede interferir con la salud ósea al reducir la cantidad de calcio en los huesos.
Entonces, ¿son los refrescos light una mejor opción? Los light utilizan edulcorantes artificiales para dar ese sabor dulce sin las calorías asociadas al azúcar. Algunos de los más comunes incluyen aspartame, sucralosa y stevia, que han sido aprobados por agencias reguladoras como la FDA y la EFSA después de pasar por evaluaciones de seguridad bastante rigurosas.
Pero, ¿qué pasa con los edulcorantes artificiales? Aunque hay estudios que sugieren que pueden tener efectos negativos en la microbiota intestinal y en la respuesta hormonal, estos estudios suelen realizarse con dosis mucho más altas que las que consume una persona promedio. A dosis moderadas, estos edulcorantes son considerados seguros y pueden ser útiles para reducir la ingesta calórica y manejar el peso, lo cual es especialmente valioso para personas con diabetes o aquellos que están tratando de perder peso.
Uno de los debates más fuertes sobre los edulcorantes artificiales es su supuesto vínculo con el cáncer. Este miedo comenzó con estudios en ratas en los 70 que sugerían que la sacarina podría causar cáncer de vejiga. Sin embargo, investigaciones más recientes y revisiones exhaustivas han demostrado que estos riesgos realmente no se aplican a los humanos, y la sacarina fue eliminada de la lista de carcinógenos conocidos en los Estados Unidos en el año 2000.
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Empezando con los refrescos regulares, están cargados de azúcar, ya sea sacarosa o jarabe de alta fructosa, y esta clase de azúcares son básicamente calorías vacías: dan energía pero poco o ningún valor nutricional. El consumo excesivo de estos azúcares está vinculado con varios problemas de salud como la obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares. Además, estos azúcares afectan la salud dental y pueden contribuir a la erosión del esmalte.
Ahora, no solo el azúcar es un problema. Tanto los refrescos regulares como los light contienen ácidos como el ácido fosfórico y el ácido cítrico, que pueden dañar el esmalte dental, haciéndolos más susceptibles a caries. Y sobre la salud ósea, consumir demasiado refresco se ha asociado con una menor densidad ósea en algunos estudios. Esto podría deberse a que el alto contenido de fosfatos en los refrescos puede interferir con la salud ósea al reducir la cantidad de calcio en los huesos.
Entonces, ¿son los refrescos light una mejor opción? Los light utilizan edulcorantes artificiales para dar ese sabor dulce sin las calorías asociadas al azúcar. Algunos de los más comunes incluyen aspartame, sucralosa y stevia, que han sido aprobados por agencias reguladoras como la FDA y la EFSA después de pasar por evaluaciones de seguridad bastante rigurosas.
Pero, ¿qué pasa con los edulcorantes artificiales? Aunque hay estudios que sugieren que pueden tener efectos negativos en la microbiota intestinal y en la respuesta hormonal, estos estudios suelen realizarse con dosis mucho más altas que las que consume una persona promedio. A dosis moderadas, estos edulcorantes son considerados seguros y pueden ser útiles para reducir la ingesta calórica y manejar el peso, lo cual es especialmente valioso para personas con diabetes o aquellos que están tratando de perder peso.
Uno de los debates más fuertes sobre los edulcorantes artificiales es su supuesto vínculo con el cáncer. Este miedo comenzó con estudios en ratas en los 70 que sugerían que la sacarina podría causar cáncer de vejiga. Sin embargo, investigaciones más recientes y revisiones exhaustivas han demostrado que estos riesgos realmente no se aplican a los humanos, y la sacarina fue eliminada de la lista de carcinógenos conocidos en los Estados Unidos en el año 2000.
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