¿Cómo tratar a los compañeros?

No tengan opiniones acerca de nadie. Dejen que todos sean libres de hacer sus labores, y den todo lo que ustedes son para apoyarlos con amor, amabilidad y bendiciones. Yo estoy observando todo cuidadosamente. Estoy decidido a traer a la manifestación las condiciones que quiero. Esto puede ser hecho, y Yo sé que los corazones de todos ustedes son leales, sinceros y nobles.

Les pido lo siguiente: si ustedes no pueden tratar un asunto de modo feliz y armonioso, suspendan la discusión. Que nadie se sienta el juez de los demás. La amabilidad y la consideración entre ustedes son imperiosamente necesarias. En este punto, están tratando con la Ley más poderosa del Universo; cada uno tiene ahora, dentro de sí, el pleno poder del logro, pero no si se juzgan entre ustedes. Si alguien hace algo que no parece correcto, no emitan ninguna opinión al respecto. Simplemente invoquen a la "Presencia" a la acción para que produzca la Perfección en esa situación, y luego impidan que sus propios sentimientos se muevan en relación a ese incidente en particular o a lo que sea.

Todo el mundo sabe cuán necesario es evitar esto, y lo inútil que es emitir opiniones, pues eso solo demorará la propia realización. En realidad, cualquier sentimiento de discordia o irritación lo hará. No es tan importante cuando se trata de cuestiones externas, aunque igualmente debería ser evitado. Pero lo importante es evitar que eso se dé entre los estudiantes. Sean dulces y amables; de ser necesario, firmes dondequiera que vayan especialmente cuando estén con los estudiantes; y no permitan que ellos los escuchen decir algo fuera de tono o cualquier cosa fuera de tono o cualquier cosa que pudiera ser interpretada como soez. No permitan que ninguna expresión vulgar salga de ustedes, porque deben ser un ejemplo para la gente del mundo.

Deseo hacerles la más cariñosa advertencia a los estudiantes, para que vigilen sus emociones y no acepten, en ningún momento, un sentimiento de envidia por los progresos que otro logra. Cada uno debe recordar siempre, sea lo que fuere, que los demás estudiantes no son de su incumbencia. Solo deben saber que: "YO SOY la Presencia de Dios en acción allí".

Cuando un estudiante se admira y se pregunta por el progreso de otro, retarda muchísimo su propia evolución, y esto es inaceptable bajo cualquier circunstancia. Déjenme decirles que la actitud correcta es regocijarse siempre por el adelanto de los demás, pues cada individuo recibe eso que más necesita, en determinado momento; y, si uno recibe una cosa, otro puede recibir otra. Por lo tanto, en ningún momento deben sentir que deberían tener la misma cosa que otra persona recibe (me refiero a una revelación). Como no hay dos personas iguales o en el mismo grado de evolución, podrán comprender que uno no puede recibir lo mismo y al mismo tiempo que otro.

La actitud más maravillosa que un estudiante puede expresar es la de bendecir continuamente a sus compañeros y alegrarse por cualquier revelación que les venga manteniendo así la puerta abierta, constantemente, a esa Gloriosa Presencia Interna.

Para ayudar a otro estudiante, afirmen: "Mira, compañero, a través de la Presencia YO SOY, te doy el poder de controlar eso". Es una Gran Ley que, cuando un amigo desea ayudar voluntariamente a otro para que se sostenga en la Luz, él o ella no deben hacer algo que incluso al Maestro no le está permitido realizar. Ven que el Poder impulsor es sabio realmente. Un Maestro no puede ir más allá de ciertos límites con sus estudiantes, por eso Él desea que reciban esta explicación poco común.

Cada estudiante sincero se apartará siempre de toda crítica, no importa cuál sea la apariencia. Las personas tienden a juzgar a los demás, viendo solamente las apariencias y dejando que la crítica corra desenfrenadamente, sin que importe la Verdad. Un estudiante no puede esperar que otro vea lo mismo que él; no supone que los estudiantes ven o sientan lo mismo. Si les viene un deseo como, por ejemplo: "Yo quisiera que fulanito hiciera tal cosa", transmútenlo inmediatamente y afirmen: "Allí solamente está Dios en Acción"

Muchas veces se conduce a los individuos a que se asocien o reúnan, con el único objeto de obligarlos a corregir estas actividades sutiles a las cuales la mayoría de las personas no le ponen atención. Esto consiste, simplemente, en aquietar lo externo para que la verdad sea recibida, y es vital para que el individuo se autocorrija.

Cuando los estudiantes y amigos sienten un profundo y sincero Amor entre sí, ese Amor es la bendición más grande y el Poder más estimulante. Esta es una manera en que el estudiante puede examinarse constantemente, para evaluar el Poder que está actuando en él.

Maestro Ascendido Saint Germain - Sagrado Libro del YO SOY.
Tomo III. Págs.121- 123