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Chica Sobresalto - Bella rareza

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BELLA RAREZA
Absurdas fumamos como si la vida ya de por sí, no nos enseñara los dientes. Inconsciente reímos, valientes, aún sabiendo que algún día terminará.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Agarrando con fuerza, cada rareza que nos distrae de la muerte.
Este momento es la forma primigenia de una obra de arte,
Somos vegetación que brota en la tierra que arde.
Un cristal que se rompe, por e ultrasonido de algún dios sin misericordia,
tan imprevisible como el clima del norte.
Algo que crece hasta que se descompone.
Pangea, trozos de tierra que se expanden,
arena repartida por todo el continente,
que un día fueron una, todavía se recuerdan,
todavía se tocan, todavía se sienten.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Estamos hechas de pequeñas decisiones, igual que las canciones.
Nadie se pregunta el porqué de esa cadencia, si deberían estar allí los valles.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Agarrando con fuerza, cada rareza que nos distrae de la muerte.
Esta canción tiene dos momentos importantes, uno es cuando descubrí Beautiful Freak de Eels. Como mi inglés es regulero, hasta estudiarlo bien, a mí freak me sonaba más a rareza que a monstruito. Entonces, habiendo leído la biografía de Mark Everett (Cosas que los nietos deberían saber), solo pensaba que son esas pequeñas rarezas las que nos salvan de tanta muerte.
Luego, gracias a Alba Cordero, leí Todo lo que sé sobre el amor de Dolly Alderton. Este libro para mí fue la panacea. Lo he leído dos veces y no descarto una tercera. Hay un texto que me conectó directamente con Mark y Beautiful Freak.
“La vida es fantástica, fascinante, mágica, divertida y absurda. Y los seres humanos somos asombrosos. Todos sabemos que vamos a morir y, sin embargo, seguimos viviendo. Gritamos y soltamos tacos y nos afecta cuando se nos rompe una bolsa de la basura y con cada minuto que pasa nos acercamos más al final. Nos maravilla una puesta de sol anaranjada sobre la M25 y el olor de la cabeza de un bebé y la eficiencia de los paquetes extraplanos en los que vienen embalados los muebles, aunque sabemos que todo el mundo al que queremos dejará de existir un día. No sé cómo lo hacemos.”
He leído esto un millón de veces y cada vez que lo hago me emociona más.
Mi amigo Txapa dice que la vida es lo que pasa entre una mierda y otra, y que conforme creces, ese espacio de tiempo de va volviendo más y más pequeño.
Bella rareza es ese perrete que va en coche asomando la cabeza por la ventana y te hace reír, una cara como la de Bella Kaiser, una canción pequeña. Tu amiga que te roza la mano por debajo de la mesa, descubrir que te queda leche de avena en un armario que desconocías. Las palomitas. Cuando crees que es el último capítulo de tu serie fav y de pronto descubres que hay otro.
Absurdas fumamos como si la vida ya de por sí, no nos enseñara los dientes. Inconsciente reímos, valientes, aún sabiendo que algún día terminará.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Agarrando con fuerza, cada rareza que nos distrae de la muerte.
Este momento es la forma primigenia de una obra de arte,
Somos vegetación que brota en la tierra que arde.
Un cristal que se rompe, por e ultrasonido de algún dios sin misericordia,
tan imprevisible como el clima del norte.
Algo que crece hasta que se descompone.
Pangea, trozos de tierra que se expanden,
arena repartida por todo el continente,
que un día fueron una, todavía se recuerdan,
todavía se tocan, todavía se sienten.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Estamos hechas de pequeñas decisiones, igual que las canciones.
Nadie se pregunta el porqué de esa cadencia, si deberían estar allí los valles.
Exhalamos al margen de que todo parezca un mero accidente,
Agarrando con fuerza, cada rareza que nos distrae de la muerte.
Esta canción tiene dos momentos importantes, uno es cuando descubrí Beautiful Freak de Eels. Como mi inglés es regulero, hasta estudiarlo bien, a mí freak me sonaba más a rareza que a monstruito. Entonces, habiendo leído la biografía de Mark Everett (Cosas que los nietos deberían saber), solo pensaba que son esas pequeñas rarezas las que nos salvan de tanta muerte.
Luego, gracias a Alba Cordero, leí Todo lo que sé sobre el amor de Dolly Alderton. Este libro para mí fue la panacea. Lo he leído dos veces y no descarto una tercera. Hay un texto que me conectó directamente con Mark y Beautiful Freak.
“La vida es fantástica, fascinante, mágica, divertida y absurda. Y los seres humanos somos asombrosos. Todos sabemos que vamos a morir y, sin embargo, seguimos viviendo. Gritamos y soltamos tacos y nos afecta cuando se nos rompe una bolsa de la basura y con cada minuto que pasa nos acercamos más al final. Nos maravilla una puesta de sol anaranjada sobre la M25 y el olor de la cabeza de un bebé y la eficiencia de los paquetes extraplanos en los que vienen embalados los muebles, aunque sabemos que todo el mundo al que queremos dejará de existir un día. No sé cómo lo hacemos.”
He leído esto un millón de veces y cada vez que lo hago me emociona más.
Mi amigo Txapa dice que la vida es lo que pasa entre una mierda y otra, y que conforme creces, ese espacio de tiempo de va volviendo más y más pequeño.
Bella rareza es ese perrete que va en coche asomando la cabeza por la ventana y te hace reír, una cara como la de Bella Kaiser, una canción pequeña. Tu amiga que te roza la mano por debajo de la mesa, descubrir que te queda leche de avena en un armario que desconocías. Las palomitas. Cuando crees que es el último capítulo de tu serie fav y de pronto descubres que hay otro.
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