Cuanto antes, mejor. Ayúdanos a prevenir la leucemia

Parar y curar el cáncer es el objetivo de los oncólogos y hematólogos. Y la ciencia es la clave para lograrlo. El diagnóstico precoz en cáncer ha resultado ser la estrategia más eficiente para detener su evolución e incluso en algunos casos conseguir su cura. Los programas de prevención y diagnóstico precoz son la herramienta más eficaz para alcanzar un envejecimiento saludable.

Hoy en día, estamos familiarizados con los programas de diagnóstico precoz de mama, de colon, y de otros tumores que llevan funcionando desde hace décadas y que están dirigidos a determinada población.
Que existan más o menos programas de diagnóstico precoz y de prevención depende del conocimiento científico que se tenga sobre los diferentes tipos de tumores. A medida que avanza el conocimiento de los distintos tipos de cáncer se podrán incorporar nuevos programas en la asistencia médica de atención primaria y especializada.

Lo ideal en medicina es poder intervenir antes de que aparezca la enfermedad, como se ha constatado en el programa de prevención de colon, que permite intervenir cuando los pólipos aún no se han transformado en cáncer. De esta manera se mejora la calidad de vida de la persona porque no llega a desarrollar la enfermedad, y se evita tener que recibir un tratamiento o tener que someterse a intervenciones quirúrgicas. En algunos casos no se puede evitar que aparezca la enfermedad, pero gracias al diagnóstico precoz, es decir, a la detección de la enfermedad en las primeras fases, aumenta la curación significativamente.

Hasta la fecha no ha sido posible poner en marcha programas de prevención y diagnóstico precoz en hematología. Sin embargo y gracias a los nuevos avances en la investigación clínica, se va a poder realizar un diagnóstico precoz pionero de leucemias y linfomas. Incluso gracias al conocimiento actual sobre las células preleucémicas y de los mecanismos que desencadenan la progresión patológica, cada día parece más factible que los hematólogos puedan intervenir antes de que aparezcan. Para dar este paso definitivo, los investigadores y hematólogos necesitan crear un observatorio, un estudio poblacional amplio, para el que se requiere la participación de la sociedad. El observatorio permitirá detectar las células preleucémicas, identificar dónde van a transformarse y así poder desarrollar estrategias para prevenir la enfermedad antes de que se desarrolle.

¿Con qué evidencias científicas contamos?
De todas las leucemias, la leucemia linfática crónica es la más frecuente en los países occidentales. Hoy sabemos que esta leucemia está precedida de una situación conocida como linfocitosis B monoclonal. De hecho, se ha comprobado que un porcentaje pequeño de personas con linfocitosis B monoclonal acaban desarrollando leucemia linfática crónica. Hoy en día se puede detectar este número pequeño de células preleucémicas. Gracias a la investigación desarrollada por el grupo dirigido por el profesor Alberto Orfao, investigador del Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca, se ha perfeccionado la metodología para aumentar la sensibilidad de la técnica y detectar un número muy reducido de células B preleucémicas presentes en la sangre. Esta línea de investigación se está desarrollando también en otros grupos españoles y extranjeros.

Utilizando, por tanto, estas herramientas ya se pueden identificar los estadios precoces de desarrollo de algunas leucemias, incluida la leucemia más frecuente en Europa.

Además del conocimiento y las técnicas, Alberto Orfao está dirigiendo un proyecto europeo para estudiar la población y así poder intervenir en un futuro de forma precoz en aquellos casos que tengan riesgo de desarrollar leucemia. Se están poniendo las bases para el desarrollo del Programa de prevención y diagnóstico precoz de la leucemia linfática crónica. Los investigadores clínicos necesitan contar con la participación de la población para su consolidación. El observatorio en esta primera fase se limitará a Castilla y León y la región centro de Portugal (Coimbra). El objetivo último es que se pueda ampliar a toda España.

Por eso, si tienes más de 18 años y vives en Castilla y León puedes participar en este proyecto, para ello, acércate a los puntos de donación de sangre de Castilla y León. Si eres médico o enfermera, enfermero o personal sanitario de atención primaria puedes también contactar con nosotros para expresar tu voluntad de participar en este proyecto. La prevención nos beneficia a todos.

Este vídeo, es complementado por otros 33 vídeos, y que ha sido realizado por el Centro de Investigación del Cáncer (Universidad de Salamanca-CSIC) forma parte de proyecto IDIAL-NET que está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del programa INTERREG V-A España Portugal (POCTEP) 2014-2020 de la Comisión Europea y cuenta con una dotación presupuestaria total de 1.150.972,01€ (financiación FEDER 863.229,01€)