Walter Benjamin (16): Benjamin y el surrealismo.

preview_player
Показать описание
Releyendo el texto "El surrealismo. La última instantánea de la inteligencia europea" de Walter Benjamin.
Рекомендации по теме
Комментарии
Автор

Escuchando sus comentarios y reflexiones acerca de lecturas benjaminianas. Recordé mis clases de Historia del arte cuando cursaba hace algún tiempo atrás (2015) la carrera de artes plásticas. Sentía atracción por la biografía pictórica de Salvador Dalí, por lo que intentaba dibujar en el taller retratos del artista. Recuerdo el cine surrealista, algo impactante para los años 20 en aquel momento El perro andaluz. Motivo que reflexionar acerca de la historia de Andalucía y el entretejido de culturas, un trampantojo a su realidad actual. Actualmente estoy leyendo a Theodor Adorno y me lleva una y otra vez a Benjamín. Pensando seriamente que estas teorías llevan a la metodología de análisis para lo que pueda construir en planteos de arte: cine, literatura, pintura, expresiones de arte colectivo, música, etc. Gracias por sus videos compartiendo lecturas del sxx aún vigentes. Espero tus comentarios de Herbert Marcusse y Raymond Williams. Salu!

leilabohorquez
Автор

Fernando, has platicado alguna vez sobre la relación de Remedos Varo y Ouspensky y los aprendizajes del cuarto camino?

arteconlavaladon
Автор

Tiene razón, las drogas hacen como de llave, pero una vez mostrado el camino, no hacen falta las drogas, pues desvían del camino y el camino del surrealismo es un camino medio entre todos los caminos, la línea recta aunque hecha a base de puntos o iluminaciones.

alejoslorenzo
Автор

La práctica de la iluminación profana, como una aproximación cabalística hacia elementos profanos.

DaedalusHyperboreus
Автор

El surrealismo nació en Francia, no por casualidad. No fue ni pudo ser en Alemania. Cada nación tiene una mentalidad y la francesa, en aquella época, fue magnífica ya que intentó unir el pensamiento racional del comienzo del psicoanálisis con el arte, es decir, con el pensamiento sensible. Ojo, el pensamiento sensible no es esoterismo ni nada demoníaco, sino lo más natural e inocente y bueno que puede haber en el ser humano, que es el amor por la vida sin más razones que amarla por amor al arte, que es el amor por la vida.

alejoslorenzo
Автор

De cómo actúa el pensamiento surrealista o pensamiento total
Si dibujásemos una línea recta con un rotulador rojo y la mirásemos al microscopio podríamos ver que en los intersticios que hay entre las microgotas de tinta roja hay unos espacios.
Estos espacios intersticiales, del material y color del soporte, son ilimitados y actúan como enlaces invisibles entre los puntos que traza el rotulador rojo, la mano humana guiada por el pensamiento consciente y racional.
A escala microscópica, menor que la escala humana, no existe la línea recta. Es màs, no existe la línea y esta se podría comparar al comportamiento de la luz, pues el soporte suele ser de color blanco, es decir, contiene el espectro completo de la luz visible, reflejàndola, no reteniéndola (importante dato pues un objeto de un color determinado es de ese color porque retiene el resto de colores u ondas salvo el que le otorgamos, que en realidad es el reflejado, no el retenido).
Si dibujàsemos aleatoriamente otras microlineas que pasen por esos espacios intersticiales, las posibilidades serían infinitas, pudiendo incluso, dada su condición microscópica o infinitesimal, pasar esas líneas por otros espacios intersticiales que se pueden encontrar màs atrasados o adelantados en el tiempo, luego, actuando como enlaces invisibles que desde el presenten, unen pasado y futuro y lo atraen al punto por el que està pasando el rotulador rojo en ese preciso momento
Esas líneas microscópicas no atienden a la geometría y a lo racional, sino a lo sensible que es recogido en ellas, es decir, esa línea puede formar parte del dibujo de la puerta de una casa, del pico de un pàjaro, etc, tanto vistos en directo, como dibujados de memoria, luego, en el pasado, o desde el presente pensando en el futuro. Son enlaces sensibles.
No sería la misma una línea de un dibujo mental de algo que ya no existe o que existe en un lugar lejano pero que alguna vez vimos, o que ya dejó de existir, aunque no en nuestra mente, y que podemos reproducir con bastante acierto, que una línea de algo que dibujamos copiando algo que estamos viendo in situ, como tampoco una línea de una puerta de una casa que existirá.
Aún siendo la misma línea con las mismas características, el mismo grosor, color, longitud, etc.
Pueden parece lo mismo pero no lo son.
Podríamos aislar esas líneas y decir: son inequívocamente iguales, son idénticas. Pero no es así, son similares. Y lo son porque al igual que la línea se puede descomponer en elementos más pequeños, infinitesimales, como en el cálculo infinitesimal mediante integración, lo mismo ocurre con un dibujo.
Las líneas no son elementos aislados, pertenecen a un todo mayor, una puerta de una casa, el pico de un pájaro o parte de la nariz de una cara en un retrato. Luego, son partes de un todo que, si bien, tienen o presentan unas características similares, no son iguales.
Y lo que las hace diferentes son esos espacios intersticiales que en un principio parecen vacíos, pero que no lo están, como antes comentaba.
No están vacíos porque desde esos espacios, o por ellos, pasan, como si fuesen ondas de luz no visible, toda una serie de hilos que conectan esa línea con otras partes, tanto del propio dibujo, de otras líneas del mismo dibujo, es decir, en una relación visual, formal, geométrica, por tanto visible, como con otros aspectos que no están en el plano bidimensional.
Esos aspectos no bidimensionales y que son los que confieren a los dibujos y a las obras de arte en particular, una espacialidad multidimensional mas allá de la tridimensionalidad euclídea, así como de la temporalidad, no son visibles, pero sí son sensibles y en un grado mucho mayor que el de los vínculos bidimensionales geométricos.
Podríamos decir entonces que el dibujante, el artista, actúa como una especie de costurero, por un lado, en un aspecto material, en una escala humana y empleando un código o lenguaje entendible por el intelecto humano a simple vista, pues la geometría descriptiva trata de eso, de describir las cosas, pero no del hecho de cómo son esas cosas en otros sentidos, como en el de la sensibilidad que proviene de la memoria, de los recuerdos, de los sentimientos pasados, presentes o venideros.
Este es el límite de la geometría, del dibujo mecánico.
Sin embargo, y aquí es en dónde entra en acción, no porque no lo haya hecho ya desde antes de empezar la obra, sino porque es cuando lo hace de una forma más profunda o rotunda, al escapar de la escala humana atada por las tres dimensiones usuales y el tiempo, dotando a la obra de una libertad mayor y de una ruptura de ese espacio-tiempo.
Esos vínculos invisibles que cosen de una forma elástica, nunca rígida, lo material de la obra con esos aspectos sensibles, se crean de una forma similar a los impulsos que se generan entre diferentes entes, pongamos como ejemplo las neuronas cerebrales y sus relaciones, las relaciones en la red neuronal.
De esos espacios salen hilos, cables o conexiones entre la obra y la mente del artista, del que está dando vida a la obra, dando vida a algo pasado, reflejando algo presente por un motivo siempre importante (afectivo, nunca político o de ninguna motivación del mismo grado y de la misma imperfección o parcialidad y no imparcialidad), o creando algo nuevo soportado en ese saber aprendido o innato, mirando, viendo, previendo, previsualizando el futuro.
Este es el camino surrealista y la forma surrealista de pensar.
Si lo he analizado así es porque es así como lo entiendo.
Igual que al clicar en un hipervínculo en la pantalla de nuestro ordenador, pueden suceder diversas cosas como visitar otras páginas web con diferentes temas, siempre con alguna relación, los hipervínculos informáticos o las ventanas que el entorno windows nos brinda para facilitarnos las cosas sin la necesidad de aprender un lenguaje informático complejo de programación, el arte lo hace desde sus comienzos y dentro del arte está el arte de la escritura, por supuesto.
Así pues, esto que ahora se nos presenta como una novedad, no es tal, sino que lo que ocurre es que, como siempre ha ocurrido, lo que han cambiado son los medios materiales. Ya no se pinta en las paredes de una cueva, pero se pinta en un lienzo, en una tabla, en una tablet, en un smartphone o en un monitor de un pc.
Pero la cuestión y la diferencia no está en el medio, que si bien, ahora es mucho más potente y al alcance de mucha más gente, lo importante no radica (importante el término) en el medio ni en el soporte, como tampoco en la cantidad de información que se puede enlazar.
La diferencia está en la mente del artista, en su saber acumulado y heredado y en cómo es capaz de aplicar esos conocimientos y sentimientos sobre un soporte cualquiera, físico o digital, no importa demasiado esto, sino lo que se dice, cómo se dice y por qué se dice, junto con el cuándo se dice.
El cómo se dice, ahora mismo puede ser mediante los medios informáticos, pero dentro de unos decenios ni eso haga falta, porque tal vez y desde el principio, las conexiones entre el entorno y las personas, así como entre las propias personas, ya existían.
Si no fuese esto cierto, probablemente no estaría aquí para contarlo escribiéndolo y dibujándolo entre estos vídeos...

alejoslorenzo