Robert Schumann (1810-1856) | Ciclo de conferencias-concierto Músicos y Medicina

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Robert Schumann fue un genio peculiar y problemático. Escribió algunas de las mejores obras del romanticismo y su música encarna el ideal de este periodo: siempre ardiente, siempre luchando por el ideal. Aunque su Cuarta sinfonía se considera un hito en la historia del género, su posteridad como genio descansa más en composiciones sutiles: piezas para piano y canciones.

Gravemente afectado por lo que probablemente era un trastorno bipolar, logró una productividad casi sobrehumana durante sus episodios maníacos; por ejemplo, compuso cerca de 140 canciones en la víspera de su matrimonio, en 1840. Murió de inanición luego de más de dos años de permanecer internado en un sanatorio psiquiátrico, a donde probablemente lo condujeron las complicaciones neurológicas terminales de una infección sifilítica.

Según el médico Adolfo Martínez Palomo, “la biografía médica de Schuman no debe interpretarse como el estigma de una enfermedad mental que afectó a un gran artista, sino al contrario, como el ejemplo de un genio que pudo sobreponerse a los efectos negativos del padecimiento y tal vez logró utilizar las fases de exaltación mental de su enfermedad para ofrecer al mundo una de las obras artísticas más originales”.

Programa:

Adagio y allegro
para corno y piano, op. 70

Fantasiestücke
para clarinete y piano, op. 73


Fraunliebe und leben
ciclo Amor y vida de mujer
para voz y piano, op. 42

Jueves 10 de noviembre

Coordina y participa: Adolfo Martínez Palomo*

Participan: Silvestre Hernández, corno; Rodrigo Garibay, clarinete; Verónica Alexanderson, mezzosoproano; y Sergio Vázquez, piano

*Miembro de El Colegio Nacional
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Комментарии
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Gracias por compartir esta interesante conferencia sobre el gran impartienda por el Dr. Martinez Palomo sobre el gran compositor Shuman. Saludos desde Mérida Yucatán

silviahernandezbetancourt
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ella era buena buenisima pianista, si, pero como compositora no era mala, pero tampoco buena, compararla con Schumann es mucho y compararla con Chopin es una tremenda exageracion, es demasiado exagerar.

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