Ars Magna: murales para reparar la ciudad

Ars Magna nació para legalizar el graffiti que tres estudiantes de 23 años llevaban practicando en la clandestinidad de la isla hace algún tiempo. Lo correcto es decir que son muralistas, porque usan rotulador, pincel e incluso óleo además del spray. Porque esbozan, piensan, integran su obra y con ella revalorizan el espacio. Yaiza, Ibone y Manolo integran este colectivo de jóvenes creadores con sede en Puerto del Carmen.

M.J. Tabar
[Viernes, 28 de septiembre de 2012]

Barcelona, Granada y Lanzarote. A pesar de venir de ciudades con enjundiosa vida de barrio y mucho arte urbano, no fue hasta conocer a Ibone Pérez y a Manolo Camacho cuando Yaiza Coronado se animó a probar el arte del graffiti, que tiene su particular dificultad. Tienen entre 22 y 23 años, y los tres cursan el Grado Superior de Ilustración en la Escuela de Arte Pancho Lasso.

Son amantes del dibujo desde esa edad inconsciente en que la genialidad se ejerce con naturalidad y sin alardes. Yaiza hacía retratos de los compañeros de clase, firmados y tasados (a 10 pesetas). Ibone diseñaba tatuajes tribales con rotulador permanente por 500 pesetas. Manolo, igual de autodidacta, dedicaba las clases de historia a perfeccionar su dibujo.

Les llama poderosamente la atención que Arrecife se vanaglorie de ser la tercera capital del archipiélago canario y adolezca de valores urbanos como son las intervenciones con spray. A pesar de las paredes que lloran mugre, del papel de pared aún visible en casas derribadas y de la cantidad de rincones visiblemente deshabitados y descuidados, no hay interés en buscar formas de reciclarlos mientras sus propietarios deciden otra intervención. Sí hay muralistas interesados.

"Arrecife es la única ciudad de la isla y no tiene absolutamente nada. No hay cosas para los jóvenes. Está simplemente abandonada", apunta Yaiza. Subrayan la diferencia entre el estar y el ser , porque como dice Manolo, Arrecife "tiene condiciones para ser uno de los mejores municipios de Canarias, teniendo como tiene el Charco de San Ginés, la Marina , el Islote del Amor, el cine [Atlántida]". Y una Rocar que es un diamante en bruto, y ya fue bien intervenida en una edición de la Bienal Off coordinada por Fernando Robayna.

Pero la materia prima de la ciudad, extraordinariamente hermosa, no se utiliza y se echa a perder. Como un vino que se convierte en vinagre peleón por la indecisión, la falta de previsión y la impunidad que otorga la ausencia de represalia. Así es Lanzarote y particularmente Arrecife. "Mira cuando hicieron el parque donde está el skatepark. Es un sitio ventoso y no pusieron ni un soco. Cuando hacen las cosas no piensan en la gente. Así funciona", analizan Ibone y Manolo. Yaiza añade una petición "Que dejen pintar los muros del skatepark. Es la primera vez que veo uno blanco".

Cuando está integrado y bien ejecutado, el graffiti y el mural es una magnífica forma de honrar el espacio público, de hacerlo visible, utilizable y artístico. "Hay que tener cabeza: no hay que hacer letras wild style en una fachada de Tinajo. El graffiti se puede adaptar al contexto. Imagínate un camello y un viejo arando; eso sí gustaría", sugiere Manolo.

Pero a pesar de la belleza y comicidad de las imágenes pintadas, a veces los propietarios optan por hacerlos desaparecer. Muchos vecinos del barrio Las Salinas todavía recuerdan la viejita con gafas que amaneció pintada en el muro del Orientación Marítima. Fue una obra efímera firmada por Flip, un grafitero del Norte de la Isla al que describen como un "espíritu libre" y al que no se localiza con facilidad. Fue autor también de una belleza nacida en un solar abandonado en la calle Francos de Arrecife. El llano está habitado por la ruina, pero la propiedad decidió tachar con pintura negra el graffiti de Flip y continuar luciendo el llano derruido. Derecho del propietario y paradoja de la ley.

Cuando todavía no eran Ars Magna intervinieron en El Atlante del Sol, el hotel abandonado de la zona de los Charcones, en Playa Blanca. Es ilegal pintar una propiedad privada sin permiso, pero muchos opinan que es ridículo poner vallas a una construcción ilegal que se asoma casi de forma indecorosa al litoral. El hotel da cobijo durante el verano a varias personas y es un excelente muro muerto para los que necesitan practicar con sprays.