NOTA 26 - *** NIVELES DENTRO DEL PURGATORIO ***

preview_player
Показать описание
NOTA 26 - *** NIVELES DENTRO DEL PURGATORIO ***

NOTA 26*

📖 _Del libro Entre el Cielo y la Tierra de María Vallejo Nagera__

*NIVELES DENTRO DEL PURGATORIO*

Hay muy pocas cosas en las que todos los humanos coincidimos, pero quizá una de ellas es la de temer el momento de la muerte. ¿Quién no queda preso en el horror cuando recibe la mala noticia de que padece
una enfermedad terminal? El instinto de sobrevivir es latente en cada ser humano cuerdo y todos deberíamos considerar que la vida es el don supremo que se puede adquirir.
Sin embargo, la Iglesia católica nos enseña que no debemos padecer temores ante la muerte, pues lo que es verdaderamente importante para el ser humano es la eternidad que viene después de ella. El fin de la vida terrena es sólo un paso en el largo proceso de la existencia de cada persona, un pequeño salto hacia el más allá, hacia una eternidad infinitamente colmada de felicidad y paz.
Pero la gran cuestión es: ¿lograremos alcanzar el cielo de golpe evitando el purgatorio? Y sobre todo: si tengo que sufrir una estancia en el purgatorio, ¿en qué nivel entraré? ¡No quiero quedarme atrapada en un nivel bajo!
Y es que no he encontrado ningún tratado sobre el purgatorio en el que se diga que es fácil evitarlo y además en todos o en casi todos se mencionan ciertos niveles. ¡A ver qué vamos a hacer usted y yo, querido lector!
Desgraciadamente no podemos saber con total certeza nada sobre el purgatorio, sus niveles o los padecimientos que habremos de sufrir en él, pues nadie ha conseguido ir allí y regresar para contárnoslo directamente a nosotros.
Sin embargo, nuevamente tenemos que dar gracias a Dios por todas las numerosísimas revelaciones privadas de los santos, de los que le hablo con insistencia en el capítulo próximo. Éstos han visto, oído y contactado con las almas por pura misericordia divina. Muchos de ellos relatan cosas curiosísimas al respecto; explican claramente que ven a las almas de forma visible físicamente. Algunas veces las perciben como seres grotescos, enfermos o terriblemente feos. Esto tiene como objetivo principal demostrar de manera característica el estado actual del alma en ese lugar o nivel de purificación. Naturalmente, el estado de todas las almas del purgatorio es diferente y son también distintos sus sufrimientos.
Santa Brígida escribe en sus revelaciones (libro IV capítulo VIII) que en el purgatorio hay tres grados claramente diferenciados. En el grado inferior es donde el sufrimiento es mayor y es similar al del infierno. Reinan en él tinieblas profundas y la pena del fuego es aplicada con todo rigor; claro que las almas que allí se encuentran sufren con mayor o menor intensidad según la medida de sus culpas. Justo encima de éste está situada la segunda esfera o nivel. Aquí los sufrimientos son menores, pues se le oculta al alma gran parte de la belleza del cielo pero no su totalidad. Hay aún gran ausencia del amor divino y por tanto gran angustia por conseguirlo. Por último, muy cerca ya del cielo, se sitúa el estrato tercero. En él no existe ningún castigo sensible, pero las almas sufren mucho por estar tan cerca de Dios y no poderle alcanzar.
La beatificada Anna Catalina Emmerich (Alemania 1774-1824) dice que las almas van pasando
paulatinamente a castigos cada vez más suaves. Por ejemplo, se dejan atrás terribles tinieblas y total soledad para alcanzar una esfera de mayor luz y con cierta compañía, la de otras almas orantes. Más arriba está el nivel en donde la luz es muy potente. Y ya casi cerca del cielo, la felicidad se palpa con cada sentimiento del alma.
Concluimos pues que las pobres almas pasan por una purificación graduada, es decir, de las regiones inferiores suben hacia las superiores y más luminosas, hasta que alcanzan una pureza y santidad verdadera, requisitos indispensables para poder estar cara a cara ante Dios.

De esta increíble joya de la Iglesia sólo se ha revelado que dicha mujer pertenecía a una familia de muy alta cuna y que había heredado títulos principescos de una de las casas reales de la Europa del siglo XVIII.
Su vocación la había llevado a abandonar posesiones y riquezas e intercambiarlos por el hábito de franciscana. Su humildad es muy alabada en todos los estudios realizados que existen sobre ella y que fueron llevados a cabo por investigadores serios que no siempre pertenecían a la Iglesia católica.
En todos también se afirma que su sufrimiento fue atroz. A veces pasaba tanto miedo al ver almas que debía dormir acompañada. Sus encuentros con las almas se producían siempre de manera imprevista y las
anécdotas vividas por ella que hacen referencia a los diferentes niveles del purgatorio son muy numerosas.
Para poderles ilustrar de forma sencilla lo que aprendió sobre los diferentes niveles de sufrimiento en el purgatorio, les he hecho una pequeña selección de aquellas que, personalmente, me dejaron más perpleja
Рекомендации по теме