Areito A Sonar

preview_player
Показать описание
Los areítos eran las ceremonias de los aborígenes antillanos en las que se conmemoraban hechos pasados de la tribu o victorias recientes, siendo un importante modo de conservar y transmitir sus propias costumbres. Eran de carácter colectivo y ceremonial y en el mismo participaban todos los integrantes de la comunidad indígena. Se podía participar de dos maneras: tan solo como observador o como participantes en las danzas rituales.
“Tenían estas gentes una buena é gentil manera de memorar las cosas pasadas é antiguas; y esto era en sus cantares é bailes, que ellos llaman areito, que es lo mismo que nosotros llamamos bailar cantando. El cual areito hacían esta manera. Cuando quería ave placer, celebrando entre ellos alguna notable fiesta, o sin ella por su pasatiempo, juntábamos muchos indios é indias (algunas veces los hombres solamente, y otras veces las mujeres por sí¬); y en las fiestas generales, así como por una victoria o vencimiento de los enemigos, o casándose el cacique o rey de la provincia, o por otro caso en que el placer fuese comúnmente de todos, para que hombres é mujeres se mezclasen. E por más extender su alegría e regocijo, tomábamos de las manos algunas veces, é también otras tratábamos brazo con brazo ensartados, o asidos muchos en rengle (o en corro así mismo), é uno ellos tomaba el oficio de guiar (ora fuese hombre o mujer), y aquel daba ciertos pasos adelante é atrás, a manera de un contrapás muy ordenado, é lo mismo (y en el instante) hacen todos, é así andan en torno, cantando en aquel tono alto é bajo que la guía los entones, é como lo hace é dice, muy medida é concertada la cuenta de los pasos con los versos o palabras que cantan. Y así como aquel dice, la multitud de todos responde con los mimos pasos, é palabras, é orden; é en tanto que le responden, la guía calla, aunque no cesa de andar el contrapás. Y acabada la respuesta, que es repetir o decir lo mismo que el guiador dixo, procede en continente, sin intervalo, la guía a otro verso é palabras, que el corro é todos tornan a repetir; é así sin cesar, les dura esto tres o cuatro horas y más, hasta que el maestro o guiador de la danza acaba su historia; y a veces les dura un día hasta otro.

Algunas veces junto con el canto mezclan un alambor, que es hecho en un madero redondo, hueco, concavado, é tan grueso como un hombre é más o menos, como lo quieren hacer; é suena como los alambores sordos que hacen los negros; pero no le ponen cuero, sino unos agujeros é rayos que trascienden a lo hueco, por do rebomba de mala gracia. E así, con aquel mal instrumento o sin él, en su cantar dicen sus memorias e historias pasadas, y en estos cantores relatan de la manera que murieron los caciques pasados, y cuántos y cuáles fueron, é otras cosas que ellos quieren que no se olviden. Algunas veces se remudan aquellas guías o maestro de la danza; y mudando el tono y el contrapás, prosigue en la misma historia, o dice otra, en el mismo son u otro.
Esta manera de baile parece algo a los cantares é danzas de los labradores, cuando en algunas partes de España en verano con los panderos hombres y mujeres se solazan; y en Flandes he yo visto la misma forma de cantar, bailando hombres y mujeres en muchos corros, respondiendo a uno que los guía o se anticipa en el cantar, según es dicho. En el tiempo que el comendador mayor don

Frey Nicolás de Ovando gobernó esta isla, hizo un areito ante él Anacaona, mujer que fue del cacique o rey Caonabo, la cual era gran señora; é andaban en la danza más de trescientas doncellas, todas criadas suyas, mujeres por casar; porque no quiso que hombre ni mujer casada (o que avíese conocido varón) entrasen en la danza o areito. Así que tornando a nuestro propósito, esta manera de cantar en esta y en las otras islas (y aun en mucha parte de la Tierra Firme) es una efigie de historia o acuerdo de las cosas pasadas, así de guerras como de paces, porque con la continuación de tales cantos no se les olviden las hazañas é acaecimientos que han pasado. Y estos cantares les quedan en la memoria, en lugar de libros de su acuerdo; y por esta forma recitan las genealogías de sus caciques y reyes o señores que han tenido, y las obras que hicieron, y los malos o buenos temporales que han pasado o tienen; é otras cosas que ellos quieren que a chicos é grandes se comuniquen é sean muy sabidas e fijamente esculpidas en su memoria. Y para este efecto continúan estos areitos, porque no se olviden, en especial las famosas victorias por batallas.
[…] En tanto que duran estos sus cantares é los contrapases o bailes, andan otros indios é indias dando de beber a los que danzan, sin ser parar alguna al beber, sino meneando siempre los pies é tragando lo que les dan. Y esto que beben son ciertos brebajes que entre ellos se usan, é quedan, acabada la fiesta, los más ellos y ellas embriagados é sin sentido, tendidos por tierra muchas horas. Y así como alguno cae beodo, le apartan de la danza é prosiguen los demás; de forma que la misma b
Рекомендации по теме
welcome to shbcf.ru